Clarin.com.- Quien hable por teléfono celular mientras maneja, sea su aparato de manos libres o no, tiene cuatro veces más posibilidades de chocar que si no hablara.La investigación, publicada por el British Medical Journal, con sede en Londres, concluye que "usar un teléfono sin manos no es para nada seguro".El trabajo fue realizado por investigadores del George Institute for International Health de la Universidad de Sydney; del Insurance Institute for Highway Safety, de Arlington, Virginia, EE.UU.; y del Injury Research Centre, de la Universidad de Australia Occidental, de Crawley, Australia.Este equipo investigó a 456 conductores que usaron celulares en rutas, quienes sufrieron accidentes y necesitaron atención hospitalaria entre abril de 2002 y julio de 2004, en Perth, Australia Occidental. En ese lugar desde el 1de julio de 2001 está prohibido manejar con teléfonos celulares manuales. Pero un tercio de los entrevistadosreconoció haber tenido un aparato pegado al oído en el trayecto en el que sufrieron los accidentes.
En el paper disponible en www.bmj.com, se da cuenta de estudios anteriores que probaron las distracciones cognitivas que acarrea el uso de los celulares, en cualquiera de sus dos variantes. En el trabajo publicado ahora, se realizaron entrevistas a las personas accidentadas y cruzaron los datos que proporcionaron con los registros de llamadas realizadas o recibidas que llevan las compañías telefónicas.
Definieron como "intervalo peligroso" el período de 10 minutos antes del accidente. Del total de participantes, 238, el 52%, tenía accesorios para el teléfono sin manos, como auriculares. ¿Resultado? "El uso de teléfono celulares por parte de los conductores hasta 10 minutos antes del accidente fue asociado con un incremento de cuatro veces en la probabilidad de accidente". Y destaca que factores como sexo, edad o el tipo de teléfono celular no afecta la relación entre uso del teléfono y el riesgo de accidente. Casi todos las personas analizadas sufrieron al menos una lesión, y la mitad, dos o más.
"Los efectos distractivos de los diferentes tipos de teléfonos sin manos —por ejemplo, buscar un auricular para contestar una llamada entrante o contestar con un kit montado en el auto— podrían no ser iguales(...) El tamaño de la muestra no fue lo suficientemente grande como para asegurar si ciertos tipos de aparato podrían ser más seguros que otros", explica el estudio.
"No es sólo el marcar un número telefónico o responder mensajes sinola conversación en sí lo que más distrae", señaló Anne T. McCartt, investigadora del Insurance Institute que agrupa a compañías de seguro, citada por el diario Los Angeles Times.
"Existe la posibilidad de que, en el futuro, alguna tecnología elimine las distracciones que provoca el utilizar el celular en el auto —dijo McCartt—, pero es difícil imaginar algún modo de eliminar la dis tracción que provoca la conversación. Nuestro cerebro sólo puede realizar determinada cantidad de tareas al mismo tiempo".
El Insurance Institute quiso hacer el estudio en los Estados Unidos, pero las empresas de telefonía celular de ese país no autorizaron el acceso a los registros de llamadas.
En Estados Unidos, los usuarios de celulares pasan más tiempo hablando dentro del auto —el 40%— que en ningún otro lado, según concluyó una investigación de hábitos de consumo realizada en abril por el Yankee Group, de Boston.
Las propuestas restrictivas —que las hay, incluso la que piden la prohibición total del uso de celulares mientras se maneja— ya han creado polémica. Incluso el Informe Mundial de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre "Prevención de los Traumatismos causados por el Tránsito", del año 2004, no fue categórico al definirse sobre una hipotética prohibición total de su uso: "Casi la mitad de los conductores utilizan hoy día teléfonos móviles para pedir auxilio en situaciones de emergencia, por lo que quizás no convenga prohibir su presencia en los automóviles".La OMS dijo esto al mismo tiempo que asegura que "los teléfonos que permiten tener las manos libres también pueden distraer a los conductores".
El estudio presentado ahora en el British Medical Journal señala también que un 2% de los conductores observados en Australia Occidental no cumple con la ley que prohibe el uso de teléfonos manuales. La misma conducta se observó en Nueva York, donde rige esta prohibición desde 2001. En un principio, el uso cayó el 50%, pero con el paso del tiempo, según el Insurance Institute, el uso volvió a los niveles anteriores "porque los conductores no le daban importancia a la multa de 100 dólares". En Argentina rige una ley similar (Ver "El problema...").
La investigación también habla del futuro. Y no es muy optimista cuando dice: "Más y más autos nuevos están siendo equipados con tecnología Bluetooth, que facilita la activación por voz (...) Parece que el uso de celulares en auto continuará creciendo, pese a la evidencia del riesgo que crea".