Este año, el Día Mundial de la
Seguridad y la Salud en el Trabajo y el Día Mundial contra el Trabajo Infantil
se unen en una campaña conjunta para mejorar la seguridad y la salud de los
trabajadores jóvenes y poner fin al trabajo infantil.
La campaña tiene como objetivo
acelerar la acción para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 8, en
particular la meta 8.8 de promover entornos de trabajo seguros para todos los
trabajadores para 2030 y la meta 8.7 de poner fin a todas las formas de trabajo
infantil para 2025. A fin de lograr estos objetivos en beneficio de la futura
generación de la fuerza de trabajo se requiere adoptar un enfoque concertado e
integrado para la eliminación del trabajo infantil y la promoción de una
cultura de prevención en materia de
seguridad y salud en el trabajo
Los 541 millones de personas
jóvenes trabajadoras de 15 a 24 años (entre las cuales se cuentan 37 millones
de niños y niñas en situación de trabajo infantil peligroso) representan más
del 15 por ciento de la fuerza laboral mundial y sufren hasta un 40 por ciento
más de lesiones ocupacionales no mortales que los trabajadores adultos de más
de 25 años.
Muchos factores pueden aumentar
la vulnerabilidad de las personas jóvenes a los riesgos en el trabajo, como su
etapa de desarrollo físico y psicológico, la falta de experiencia laboral y de
capacitación, la limitada conciencia de los peligros relacionados con el
trabajo y la falta de poder de negociación que puede llevar a los trabajadores
jóvenes a aceptar tareas peligrosas o malas condiciones de trabajo.
La campaña del Día Mundial de la
Seguridad y la Salud en el Trabajo de 2018 destaca la vital importancia de
abordar estos desafíos y mejorar la seguridad y la salud de los trabajadores
jóvenes, no solo para promover el empleo juvenil decente, sino también para
vincular estos esfuerzos en la lucha contra el trabajo infantil peligroso y
todas las otras formas de trabajo infantil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Escriba su Comentario